¿Innovar de forma habitual? ¿Cómo hacer de la innovación un hábito?
Janet Sernack compara el proceso de convertir la innovación en un hábito a un «baile en el que tienes que adaptarte a los cambios propios de cada tempo» para poder obtener resultados. Me parece una comparación genial. ¿Te gusta bailar?
La idea general pasa por saber sincronizar los sistemas con la estrategia y las personas con la tecnología. Janet Sernack anima a las organizaciones a tener suficiente agilidad, pero al mismo tiempo a buscar la simplicidad. ¡Los resultados pueden ser extraordinarios!
Como en el baile, debes poder ser capaz de desarrollar habilidades básicas de forma que te «salgan los pasos», o que la innovación sea un hábito natural.
Janet propone cuatro aspectos a tener en cuenta para convertir la innovación en un hábito.
Visión
«No hay nada más desmoralizante que un líder que no puede articular claramente por qué estamos haciendo lo que estamos haciendo»—James Kouzes y Barry Posner¿Eres capaz de clarificar una visión de futuro y pasarla a tu equipo de innovadores? Tener una visión clara y ser capaz de articular ayuda a inspirar a tu equipo y con ello a mejorar los niveles de participación. ¿Tienes una visión clara sobre el cliente final de tu innovación? Qué valor aportará tu producto o servicio a este cliente? La visión te permite alienar el liderazgo, los recursos y obviamente los esfuerzos de implementación. No se trata de la declaración de la misión, o visión de la organización. Va mucho más allá. Se trata de impregnar tu visión en la organización para que la visión se manifieste en las creencias, acciones, objetivos y valores de los demás líderes y equipo. Cada día.
Cultura
La cultura se come a la estrategia para desayunar—Peter DruckerNo es posible hablar de innovación sin hablar de cultura. Tampoco es posible hablar de innovación sin hablar de un entorno, o espacio donde las personas puedan desarrollar su potencial creativo y tengan libertad para el fracaso. Esto abre camino a la implementación y, por su vez, la innovación se transforma en la «forma de hacer» de la organización. «Una cultura de innovación empieza cuando aceptas que el mundo ha cambiado y debes estar abierto para los cambios del futuro». Debes poder ser capaz de desarrollar una cultura donde las personas se sientan libres para colaborar, practiquen la empatía y sepan resolver los problemas del cliente final.
Aprendizaje
«El cambio es el resultado final de todo aprendizaje verdadero»—Leo BuscagliaEn la misma línea de los puntos anteriores, para resolver los problemas del cliente final, debes aprender con él. Y para aprender, debes poder desarrollar en tu equipo la necesidad de aprender – ¿redudante? – en situaciones o contextos complejos, inciertos e incluso adversos. Además tu equipo debe sentir la libertad y el permiso para jugar, arriesgar, experimentar y sobretodo equivocarse para aprender. Debes poder integrar las metodologías de «nuestros tiempos» para aprender y resolver los problemas.